En la 2ª mitad del siglo VIII, estando Cataluña dominada por los árabes, surge un hombre que saliendo del corazón de las montañas, pasaría a la posteridad como el restaurador del territorio catalán. Este hombre, de quien únicamente se conserva el recuerdo de su valor y la memoria de sus hazañas, fue Otger Catalón, que agrupó a su alrededor a nueve esforzados guerreros, conocidos en la historia con el nombre de los “Nueve Barones de la Fama”. Uno de estos Barones, fue D. Galcerán Yolt.
Otger Catalón y sus nueve Capitanes iniciaron la reconquista de Cataluña y ganaron a los moros las tierras que más tarde se repartirían en nueve Baronías. Algunos tomaron como apellido el nombre de las tierras conquistadas, como le sucedió a Yolt, que al ganar la plaza de Cervera, conservó su Baronía y el Señorío del Castillo, pasando a llamarse D. Galcerán de Cervera. Allí fundó su Casa Solar y sus descendientes se apellidaron Cervera.
La carencia de datos, muy frecuente respecto a sucesos y personas de tiempos antiguos, nos lleva a un vacío de más de 300 años, en los que no aparece ningún Cervera expresamente mencionado en documento, historia o crónica. A partir del siglo XI vuelven a encontrarse descendientes de D. Galcerán de Cervera ligados a sucesos públicos y hechos de Armas, especialmente a lo largo del reinado de D. Jaime I el Conquistador
.
Desde el año 1068, en que se inicia el árbol del apellido Cervera con D. Dalmacio de Cervera (Gen.1), todos los personajes que llenan sus casillas pueden considerarse históricos, y a partir del año 1500 se cuenta ya con documentos fidedignos que garantizan su autenticidad.
El Escudo de Armas del apellido Cervera ha sufrido muchas variaciones. En el siglo XII, D. Guillermo de Cervera lleva en su escudo sobre campo de plata, el árbol de su nombre, poblado con muchas hojas, y es D. Raimundo de Cervera, en el siglo XIII, el que trae por armas un ciervo encarnado y ramado de ocho puntas, sobre campo de oro, adornado con morrión o celada de acero bruñido, claveteado y perfilado de oro, forrado de rojo, puesto enteramente de perfil, mirando al lado diestro en señal de legitimidad y montado en pinachos de varios colores.
En el siglo XVIII se unen ambos motivos en un solo Escudo, con la figura central del águila, indicativa de la descendencia de los Duques de Saboya.
La composición de este Escudo fue presentada y registrada en 1775 en la Cancillería de Granada.
En esta WEB se ha modernizado y actualizado para poder utiliizar el escudo a modo de logo siendo adaptado a nuestro tiempo.
La esencia del escudo es la misma, con una imagen sea más fresca y renovada.
A continuacion mostramos comparativa de los diferentes escudos.